Las Violetas |
Que una confitería aparezca en Wikipedia tiene su mérito, eso le pasa a "Las Violetas" que tienen su propio espacio en la enciclopedia virtual, de donde sacamos mucha de esta información. En Buenos Aires hay un grupo de bares, cafeterías y restaurantes que se agrupan en el concepto "Bares Notables", son 59 y tienen gracias a ello el apoyo del Ayuntamiento, son algo así como lo más de la ciudad: Patrimonio Cultural de la Ciudad de Buenos Aires. Ello es así por su permanencia en el tiempo y por estar vinculados a la historia viva de su gente, por haber contribuido a hechos culturales e históricos relevantes, por su diseño arquitectónico conservado, etc. Este bar, confitería en su uso principal, aunque también restaurante, estaba enfrente de donde nos alojábamos nosotros en Buenos Aires aquel mes de Agosto del 2007, calle Medrano esquina con Avenida Rivadavia (nº 3899). Era nuestro lugar habitual para el desayuno previo antes de patearse todos los rincones de Buenos Aires. "Las Violetas" fue inaugurada el 21 de septiembre de 1884.
El bar cuando se abrió, a finales del XIX, Almagro era un confín rural entre Buenos Aires en sí y Flores, que acababa de perder su condición de pueblo independiente por la capitalización porteña, nada parecido a lo que ocurre ahora que se encuentra absorvida por la ciudad con una parada cercana de metro. Antes apenas pasaba el tranvía a caballo por la avenida Rivadavia y había más quintas rurales que casas en el tejido urbano. Posteriormente "Las Violetas" vivió una remodelación en la década de 1920, mejorando vidrieras y puertas de vidrios curvos, vitrales e incluyendo pisos de mármol italiano. El local que vemos hoy es de 1928 e idéntico al original: se lo rehízo para darle un gran sótano y fuertes cimientos para trepar en altura, lo que ocurrió en 1942, con los tres pisos que coronan la confitería. En los tiempos pretéritos de gloria de "Las Violetas" se buscaba una imagen de solidez, y un estilo ligado a la tradición, que se traducía en una gran preocupación por la elegancia del local, como podemos ver en las fotos. En esta confitería destacan, diría lucen, los mejores bronces, maderas nobles y espejos, mármoles y vitrales.
Sus emblemáticos vitrales, puede apreciarse en la foto de arriba, son argentinos pero realizados con materiales traídos al parecer de Francia, en base a bocetos en acuarelas y tinta china de un escenógrafo diseñador en un taller que quedaba en Buenos Aires, en la calle Piedras, y fueron colocados cuando la renovación del año 1928. Dichos bocetos, que se conservaron, se confeccionaron de acuerdo con el arquitecto que tuvo a cargo la remodelación del local. La persona a cargo de hacer los vitrales fue Antonio Estruch, quien ya tenía la experiencia de haberlos hechos para el Café Tortoni. Dicen los camareros que las mismísimas Abuelas de Plaza de Mayo solían reunirse en "Las Violetas" aunque de forma ciertamente clandestina. Hacían como si festejaran algún cumpleaños.
Las Violetas, medias lunas, café y un periódico para empezar el día. |
En 1998 fue declarada "Las Violetas" sitio de interés cultural por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. A pesar de ello hubo un periodo cercano que estuvo a punto de perderse esta enigmática confitería, fue en el comienzo del siglo XXI, el lugar permaneció cerrado y semiabandonado. Afortunadamente una recuperada Argentina trajo una recuperada "Las Violetas", y al año siguiente se llevaron a cabo obras de restauración, que comenzaron en enero del 2001 y terminaron en junio del mismo año, comprendieron el revestimiento en madera del lugar, las arañas, columnas y cielorraso. El piso del lugar fue irrecuperable, por lo tanto, se mandó a construir otro respetando tamaño, forma y colores originales. La fachada fue conservada en su totalidad manteniéndose sus mármoles originales. Los trabajos de restauración llevaron unos seis meses de tareas de investigación y tramitaciones municipales en el área de patrimonio histórico.
Comentarios
Saludos
Gracias por compartir.
Alfonso - the world thru my eyes -
www.thewotme.com
por mi parte la recomiendo!