Quizás sea una de las ciudades más interesantes de La Rioja, estamos hablando de Santo Domingo de la Calzada, que ya era importante en el siglo XI. Como toda población medieval la vida corría en torno a la iglesia y al hospital que había puesto en marcha el eremita Domingo García. La villa medieval de Santo Domingo bajo el gobierno del Abad hasta 1250, pasará a la administración del Rey. De esta época es la división entre Barrio Viejo, desde el camino desde Logroño, hasta la Catedral; y el Barrio Nuevo desde la Catedral hasta la salida hacia Burgos. Sin duda lo más importante de la ciudad y lo que más merece la pena es ver la Catedral (previo pago) y subir a la Torre Exelta, separada del conjunto catedralicio y desde la que se tiene unas vistas espectaculares, siempre que puedas subirte los escalones de sus setenta metros de altura. Santo Domingo de la Calzada es una de la paradas obligatorias para todo aquel peregrino que viaja hacia Santiago de Compostela a través del Camino de Santiago Francés.
Por cierto la leyenda de la gallina os la contaré al final de esta entrada: ¿saben que es la única catedral que tiene un gallinero? ...
Cripta de Santo Domingo |
Plano de Santo Domingo de la Calzada en la Edad Media |
En los siglos XIV y XV, se construye la muralla (veis el croquis de arriba) y empieza a modelarse tal como hoy la conocemos en lo que respecta a su casco antiguo. Luego vendría la construcción de la Plaza Mayor y el Ayuntamiento; ya en el siglo XIX Santo Domingo de la Calzada se convierte, en cabecera de la comarca y partido judicial de la provincia de Logroño.
Realmente la ciudad gira en torno a una persona, Domingo García, el santo que da origen al nombre de la ciudad, Santo Domingo de la Calzada. No nació aquí sino en un pueblo de Burgos, pero aquí vivió y aquí murió. Fue el mayor impulsor en su época del Camino de Santiago.
La Catedral
Realmente desde el año 1959, Santo Domingo no es como tal, Catedral, sino "Concatedral" junto a la de Logroño, ya que el título de catedral se trasladó a la Catedral de Calahorra. Aunque desde los tiempos de la II República es Monumento histórico-artístico perteneciente al Tesoro Artístico Nacional.
Conviene comprar la entrada para ver el claustro y el tesoro de la Catedral, se entra por la parte trasera.
La Catedral tiene tres naves, una central y dos laterales, que se comunican por detrás del altar, recordemos el carácter de la iglesia en el Camino de Santiago para que los peregrinos dieran la vuelta completa al templo. Hay dos capillas laterales preciosas, como veis en algunas de las fotos que aquí muestro.
Realmente su Catedral es una de las iglesias de peregrinaje, dentro del camino francés a Santiago. El retablo es obra de Damián Forment, tiene nueve metros de ancho y trece de alto. La policromía se debe a Andrés de Melgar, con temas mitológicos: tritones, sátiros, nereidas y centauros.
La Torres Exenta es la tercera torre de las que ha tenido la Catedral. La primera era de estilo románico pero un incendio motivado por un rayo, acabó con ella en 1450, la segunda torre fue gótica y esta tuvo que demolerse por ruina. Al final la tercera, la que veis en la foto, ya barroca, del arquitecto Martín de Beratúa.
Esta exenta al edificio, por eso, obviamente, se llama la Torre Exenta. Fue levantada entre 1767 y 1769. Como la segunda se derrumbó y al parecer por que un arroyo que erosionó los cimientos, pues entonces se estudiaron los terrenos y se decidió hacer apartada de la Catedral en un terreno más sólido. Si te atreves a subirla podrás ver lo que se muestra en las fotos de abajo.
Desde el año 1973 su casco antiguo es Conjunto de Interés Histórico Artístico.
"...donde cantó la gallina después de asada"
Esta frase popular en la ciudad, casi su lema, se debe a un milagro, el milagro del gallo y la gallina, según el cual Domingo García, vamos Santo Domingo, demostró la inocencia de un peregrino acusado erróneamente de muerte al hacer volar una gallina que estaba asada en el plato. Literalmente fue así, bueno así se cuenta, mejor dicho:
En el siglo XIV peregrina a Compostela un joven alemán de 18 años llamado Hugonell, que va acompañado por sus padres. En el mesón donde se hospedan trabaja una muchacha joven que se enamora de él y le requiere de amores, a lo que el muchacho se niega. Despechada y con ansias de venganza guarda en el zurrón del joven una copa de plata y luego le acusa de robo. El joven Hugonell y sus padres se disponen a partir para seguir el peregrinaje, cuando llega la justicia y comprueban la acusación registrando el zurrón del muchacho. Es encontrado culpable y condenado a la horca. Los padres no pueden hacer nada por él más que rezar a Santiago. Al acercarse al cuerpo ahorcado de su hijo para despedirse oyen cómo éste les habla desde la horca y les dice que está vivo por la gracia del Santo. Felices y contentos van a comunicar la noticia al corregidor que justo en ese momento está cenando opíparamente unas aves. El corregidor naturalmente se burla de lo que oye y lanza la frase conocida: “Vuestro hijo está tan vivo como este gallo y esta gallina que me disponía a comer antes de que me importunarais”. Y en ese momento, las aves saltan del plato y se ponen a cantar y cacarear alegremente.
Por ello en la catedral hay siempre un gallo y una gallina vivos. Este milagro se cuenta en Portugal, ya saben el típico gallo, el de Barcelos. Como todas estas supersticiones, sirvieron para hacer más famoso el templo.
La gallina y el gallo están por todos lados, en piedra, en plata, en los escudos... |
Por eso es la primera Catedral donde hay un gallinero, se encuentra a la espalda de donde está el sepulcro de Santo Domingo, en el lado de la Epístola. El gallinero fue construido hacia 1460, en piedra policromada que alberga una pareja peculiar: un gallo y una gallina blancos. Abajo veis la foto del gallinero que se encuentra elevado y difícil de fotografiar.
¿...un gallinero en una catedral? |
Documentalmente existe un legajo en el archivo de la catedral, una bula del papa de Aviñón, Clemente VI en 1350, en la que se establecen indulgencias para los fieles que ayudaran al culto de la catedral, que asistieran a los oficios divinos o que "mirasen al gallo y a la gallina que hay en la iglesia". Los voluntarios de la cofradía de Santo Domingo se encargan de cambiar al gallo y a la gallina cada mes.
Parador.
Nosotros nos alojamos en el Parador, bueno el que estaba abierto en la pasada Semana Santa, porque hay dos paradores en la ciudad y uno está cerrado, desconozco si temporalmente o para siempre. Esta muy bien en los espacios comunes y el restaurante, pero las habitaciones están un poco desangeladas, el WiFi no tiraba y el personal algo "seco" para lo que estamos acostumbrados en estos sitios.
Parador de Santo Domingo de la Calzada |
Bueno esperemos, que ya sea por ir de paso en el Camino de Santiago, o expresamente a la Rioja, no dejes de visitar Santo Domingo de la Calzada, merece la pena. Saludos viajeros !!!
Comentarios
buena informacioón y bonitas fotos
Un saludo
Carmen