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A la llegada a Ponferrada te encuentras con un castillo de esos de película; Alfonso IX de León donó la ciudad conquistada a la Orden del Temple, que construyó esta impresionante fortificación |
Los leoneses, algunos, no todos, quieren independizarse de Castilla y León, y, a sus vez, los del Bierzo quieren diferenciarse de León, de hecho El Bierzu es la única comarca diferenciada en el Estatuto autonómico y su capital es Ponferrada. El Bierzo que fue provincia en el siglo XIX, limita al norte con Asturias, al oeste con Lugo y Orense; los Montes de León se consideran el límite natural oriental con el resto de la provincia. Hay incluso un dialecto berciano con diversas variaciones locales. Aquí, en las orillas del Sil, ya había poblamientos en el Neolítco, y luego en la Edad del Hierro y en la época romana. El núcleo urbano de Ponferrada está bañado por dos ríos, el Sil y el Boeza. En el siglo XI, el obispo Osmundo de Astorga ordena la construcción de un puente, para facilitar el tránsito de los peregrinos del Camino de Santiago, este puente se verá reformado y reforzado con hierro, lo que dio nombre a la población que creció en sus alrededores, Pons Ferrata y luego Ponferrada.
La fundación de la iglesia de San Pedro, en el año 1086 dio lugar a la primera denominación de lo que fue, al principio una aldea, La Puebla de San Pedro, que es como se llamó por primera vez a Ponferrada. Cien años después el rey leonés Fernando II concedió a la villa los primeros fueros, hasta que cedió la misma a la famsoa Orden de los Templarios, ya en la época del rey Alfonso IX. Y hasta aquí llegaron con el maestre Guido de Garda. Un tal Fray Helías fue el primer comendador de Ponferrada.
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Una vista de la villa y parte del castillo |
Castillo templario de Ponferrada
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Hay cuatro puertas de entrada en el castillo: El Cristo, Paraisín, Las Nieves y Las Eras |
Durante los siglos XIII y XIV, en el entorno de la muralla templaria comienza a crecer la villa, tanto dentro como fuera del castillo. El Camino de Santiago originó también un desarrollo económico, así como la llegada de una importante comunidad judía. A partir del año 1343 con la disolución de la Orden del Temple, Ponferrada pasó a depender del linaje de los Castro. Es Pedro Fernández de Castro el dueño y señor de la villa, dejándola en manos de su hija, Juana de Castro, pero esta no tiene descendencia y Ponferrada pasa de nuevo a manos de la Corona leonesa. Ponferrada fue escenario de las llamadas
revuelta irmandiña contra los abusos de los nobles que, iniciada en Galicia con el nombre de la Irmandade Fusquenlla (Hermandad Enloquecida), se expandió al Bierzo, llegando hasta Ponferrada, donde se refugió buena parte de la nobleza gallega que huía de los
irmandiños, pero estos llegaron hasta aquí y hubo importantes daños a la villa y al castillo.
Basílica de la Encina
Los templarios en la localidad generaron varias leyendas, entre ellas la que nos habla del hallazgo de una imagen de la Virgen en el hueco de una encina, en torno al año 1200. La basílica tiene su origen en una antigua iglesia medieval del siglo XII, que fue reconstruida, por no decir "tirada", para construir una mayor en el siglo XVI. La obra tardó más de un siglo por culpa de la peste que asolaba el Bierzo. Entre 1648 y 1670, se retomaron las obras. Se cambió la planta de cruz latina por una de tres naves. Nuevas reparaciones por el efecto destructor de un rayo, llevaron consigo la incorporación de partes que seguían el nuevo estilo barroco, en contraste con el existente renacentista. En el templo está la imagen de la Virgen de La Encina, que es la Patrona de todo El Bierzo. Abajo fotos de su interior: los retablos, la Virgen y el Cristo de la Fortaleza, muy venerado en el pueblo
Más de Ponferrada...El Bierzo, en la época medieval, tenía su capital en Villafranca, y en el siglo XIX, Ponferrada y el resto de localidades del municipio pasaron a formar parte de la provincia de Villafranca, que luego pasaron a estar adscritas a la provincia de León. Sin embargo, con el siglo XX, llegó un crecimiento de Ponferrada y su liderazgo sobre Villafranca, debido, sobre todo, a la explotación de las minas de hierro y carbón, y la instalación, en 1949, de la central térmica de Endesa.
La calle del Reloj, comunica la plaza de la basílica con la del Ayuntamiento, y la Torre del Reloj, que era la antigua puerta de la ciudad, sus dos primeros tramos son del siglo XVI, durante el reinado de Carlos I, sobre uno de los arcos de la antigua muralla medieval. A finales del siglo XVII se le añadió un tercer piso.
La Casa consistorial (1692) es de estilo barroco, también destaca la Iglesia de San Andrés, cerca del castillo.
Hay varios museos, el del Bierzo, el del Ferrocarril, el de la Energía y el Museo de la Radio (arriba en la foto), promovido por el periodista Luis del Olmo, alberga numerosos ejemplares de radio únicos.
Espero os haya gustado y os animéis a visitar El Bierzo y todos estos lugares.
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Saludos
CarmeLa